Tuve inconvenientes con la hospitalidad de la gente que atiende la terraza. Quisimos tomar un café y a pesar de hospedarnos en el hotel y de estar toda la terraza vacía , solo nos querían ubicar en una mesa que daba el sol , y hacía muchísimo calor, argumentando que el resto estaba todo reservado. Nos sentimos maltratados ya que repito no había ningún cliente.